viernes, 27 de noviembre de 2015

El principio del fin y el fin del principio

Llegó el momento tan temido y esperado a la vez; mi familia estaba deseando "deshacerse" de este curso y tenerme un poquito más, al menos como me tenían antes. Lo que no saben aún es que nunca hay vuelta atrás y mi evolución prosigue... Podré dedicarles más tiempo y, lo que es mejor, más tiempo de calidad, pero ya se ha despertado en mí el deseo de conocer más y más el mundo FC, de convertirme en una fCiudadana.
Ha sido una experiencia muy gratificante, tanto por todo lo que he aprendido, tooooooodo lo que he descubierto que quiero aprender y la forma de hacerlo.
Destaco sobremanera el seguimiento, apoyo y motivación que me ha aportado mi tutora durante todo el proceso, contestando a la mayoría de mis correos incluso al instante. Me ha resultado muy difícil compaginar mi vida laboral, familiar y mi voluntariado con este curso pero siento que he llegado al final gracias a su apoyo y consejos; me encantaría hacer más cursos del INTEF y el saber que maría puede ser mi tutora de nuevo es lo que puede llevarme a matricularme de nuevo.
También me ha gustado mucho, y sorprendido, el ambiente de la cafetería, el entusiasmo de mis compañeros...; llevo tiempo pensando que se está gestando una revolución enmascarada y que antes o después la detonaremos con un sinfín de fuegos artificiales coloreados por todas las increíbles metodologías compatibles con este plausible y necesario modelo pedagógico.
Me llevo mucha información y un listado con tropecientas páginas a las que me he suscrito y poco a poco investigaré para sacarle el jugo a tope y varios tableros pinterest (desconocido por mí hasta ahora) con todo lo que quiero aprender en un futuro inmediato.
La dinámica de exposición de los materiales, la forma en que nos habéis empapado de todo lo concerniente a FC casi sin darnos cuenta ha sido estupenda; estoy encantada, de verdad.
Como sugerencia (aspecto mejorable), decir que he echado en falta el poder conocer la rúbrica de evaluación utilizada para valorar nuestra forma de valorar los proyectos de nuestros compañeros; hubiera aprendido mucho más si se me hubiera recomendado diferentes formas de motivar y sugerir mejoras, comentarios que no hice y que  hubieran sido enriquecedores y, por supuesto, qué hice bien para poder seguir haciéndolo.
No tenía muy claro qué me iba a encontrar y me ha sorprendido gratamente descubrir un mundo paralelo en el que ya están funcionando de forma satisfactoria muchos profesores, alumnos e incluso comunidades educativas.  El FC es un camino a seguir y me encanta saber que estoy en ello.
Ahora dispongo de material y argumentos para seguir "predicando" en esta línea y, con suerte, conseguir que algunos de mis compañeros se matriculen del curso y podamos suscitar ese hermoso cambio que están pidiendo a gritos nuestros jóvenes bajo el emblema de "dame una infancia que no tenga que superar".

Respecto a las sesiones formativas con mis compañeros, he quedado muy satisfecha; el uso de tantos recursos me ha permitido sacar el máximo partido a esos 90 minutos de que disponía por grupo. No todos pero unos cuantos sí se han posicionado en el cuadradito siguiente de mi rúbrica de evaluación al finalizar la sesión con respecto al comienzo.
He recibido muchos comentarios que alimentan mis esperanza: "aún no me ha quedado del todo claro pero nos ha venido fenomenal para descubrir unos cambios a mejor que ya hemos acordado realizaremos a nivel departamento", "yo me pongo a ello y te lo voy pasando, a ver qué te parece"..., y lo que más me ha gustado es que algunos han querido saber más. Es en ese momento cuando les he hablado de los cursos del INTEF y generado cierto interés.

Además de dos nuevas contracturas, lo aprendido y una profesional más a la que admirar, mi tutora, me llevo el entusiasmo de saber que somos muchos, cientos, los que estamos sembrando, y que dentro de unos años habrá cabezas pensantes y corazones inteligentes para recoger esa cosecha.

Gracias por esta experiencia que no ha hecho más que comenzar.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Aprendiendo vertiginosamente

Ni que decir tiene que este aprendizaje "vertigionoso" viene cargado de connotaciones positivas: no sólo estoy ampliando conocimientos tanto a nivel teórico, práctico y multimedia sino que estoy descubriendo un inmenso mundo del que no conozco lo suficiente de nada como para afirmar algo.
Este descubrimiento me lleva  a querer saber más y más y a desear transmitírselo a mis compañeros de forma que les empape y les llegue tan profundo que lleguen a ver la de trabajo, disgustos y esfuerzo que se ahorrarían poniendo en marcha este modelo pedagógico y todas las metodologías relacionadas.

Sentar a los alumnos de cuatro en cuatro no es aprendizaje cooperativo; poner un pdf en la pantalla digital no es utilizar las TIC; repasar las partes de un árbol sobre el libro teniendo un estupendo jardín en el patio no es aprendizaje por descubrimiento; cantar las tablas de multiplicar una y otra vez no es aprendizaje significativo (lo bueno es que se puede cubrir los requerimientos de LOMCE sobre cantar en coro); quitar preguntas o trozos de preguntas a un examen no es adaptarlo sino tachar de tonto al que no lo es y exacerbar en el resto de alumnos y padres el sentido de la injusticia; los coles que han "intentado" incluir el uso de las tablets y han "fracasado" se han tirado a una catarata sin saber nadar... en definitiva, ya sospechaba lo anterior pero ahora tengo más y mejores argumentos. 

En este sentido, mi responsabilidad, prácticamente mi misión, es convencer y la mejor forma de predicar es el ejemplo. Seré ilusa pero tengo que seguir pensando que este cambio de paradigma es posible y es que, como bien me ha dicho mi padre siempre y espero que siga otros setenta años diciéndomelo, "muchos pocos hacen un mucho".

En cierto modo, entre el apoyo-presión-cercanía-comprensión-recordatorio-tirayafloja de mi querida tutora, y mi tesón en evitar dejar a medias por primera vez un curso (más de una vez lo tuve en mente), he ido absorbiendo este cúmulo de información enriquecida que, sin darme cuenta, me siento capaz de hacer un Proyecto Flipped. Para ello he tenido mucha ayuda, por supuesto, de mi tutora pero también de los compañeros a los que he corregido su proyecto, pues, al detectar las posibles mejoras y hacer recomendaciones, he terminado por mirarme el ombligo. He intentado ser justa, honesta y dar todas las recomendaciones posibles para que su texto quede enriquecido de cara al proyecto final.
Le he dedicado más de una hora a cada uno y para contestar cada pregunta me he releído el texto varias veces buscando serles de utilidad; en definitiva, espero hacerlo con mis alumnos.

Ignoro si nuestra valoración en sí va a llevar nota (he de reconocer que soy autocompetitiva, y si es un "excelente" mejor que mejor) pero me gustaría, no por el hecho en sí sino por lo enriquecedor que sé van a ser las aportaciones de mi tutora, la cual ya me iluminó sobremanera al ofrecerme sus recomendaciones, que se extendiese corrigiendo mis recomendaciones para aprender, además, a enviar mensajes positivos acerca de su evolución y crecimiento al alumnado, en mi caso, al profesorado.

Dejo el vídeo colgado porque es un recordatorio de la diferencia que hay entre "lo que está en mi cabeza" y lo que soy capaz de hacer en realidad; aunque lo creas imposible porque no lo luce ne absoluto, esta composición me ha llevado más de 15 horas de reloj y una media de 3 discusiones semanales con mi marido y 2 regalitos de compensación de culpabilidad hechos a nuestra hija.

Deseosa de continuar y triste por ver cercano el final, corto y cambio.